Aprender a leer las horas en un reloj es una habilidad compleja, que requiere cierto grado de abstracción, conocer los números, vocabulario complejo… Por esta razón los niños en general y también los que tienen TEA suelen tener dificultades para hacerlo.
Hoy os proponemos un material autocorrectivo para trabajarlo y también otras ideas manipulativas y divertidas. En este enlace del gobierno de Canarias, además, podéis practicar online poniendo una hora y reconociendo el movimiento de las agujas…
El imprimible (puede descargarse pinchando en la imagen) consta de todas las horas en punto y en y media, con apoyo visual de colores en las manecillas del reloj. Está confeccionado con la respuesta en letra en otra tarjeta. La idea es pegar cada uno con su correspondiente respuesta y después plastificarlo junto para que sea más rígido y dure más.
De esta manera el niño tras dar una respuesta puede mirar y comprobar si lo ha hecho correctamente o si se ha equivocado. Otra opción sería pegar por detrás el reloj digital, ya que la mayoría de niños aprende a leer éste en primer lugar y le puede facilitar la tarea de generalización.